[Artículo publicado originalmente el 27/11/2017 en 20 minutos]
Hace un tiempo publicaba y titulaba un artículo con un rotundo “Nadie hablará de nosotras si no estamos en Wikipedia”. Puede resultar exagerado, pero lo cierto es que si hacemos una búsqueda en internet, la primera entrada que aparece, si es que existe, es la de la Wikipedia. Las personas que nacimos con las enciclopedias de papel no cuestionábamos su contenido. De la misma forma, las nuevas generaciones utilizan la enciclopedia online, libre y colaborativa dando por supuesto que lo que está es lo que importa. ¿Y lo que falta? Lo que falta… ¿puede que no sea tan relevante?
Podemos pensar que esta pregunta es una barbaridad, pero pensad que si vamos identificando como “importante” o “necesario” lo que nos muestra ese primer rastreo en un buscador, de forma subconsciente estaremos estableciendo la relevancia de lo mostrado e irrelevancia de lo que no aparece.
Millones de personas consultamos diariamente esta plataforma cuyo contenido, que documenta las vidas de personas, hechos históricos, obras, lugares, crece cada vez más. Sin embargo, el número de editores, en proporción al número de quienes sólo la consultan, es tan pequeño que se puede estar creando una nueva élite que decide qué es lo importante de nuestra Historia. Para que os hagáis una idea, de los más de 560 millones de hispanohablantes, en el último año se han contabilizado unos 4.500 editores activos, es decir, que hay unos 8 editores por cada millón de hablantes.
¿Y qué pasa con la Wikipedia en términos género? Podríamos esperar que siendo una herramienta del siglo XXI no estuviera marcada por la desigualdad de otros espacios que son más evidentes en nuestra sociedad. Sin embargo, los datos son muy alarmantes ya que, del total de quienes crean contenido en esta enciclopedia, menos del 16% somos mujeres. Evidentemente, esta falta de editoras repercute de forma directa en los contenidos que existen, de los que las biografías de mujeres no llegan ni al 10%.
Además, el contenido que existe necesitamos revisarlo con perspectiva de género ya que la mayoría de las biografías de mujeres centran su peso en su vínculo afectivo o familiar, y no en sus aportaciones a la Historia. Es decir, nosotras estamos en Wikipedia por ser las madres, esposas, hijas o hermanas de los hombres reconocidos. Un dato biográfico que, siendo importante, no debería marcar desde el inicio la descripción de nadie, y que en el caso de ellos, si aparece, lo hace en un plano muy secundario. No se trata de eliminarlo, sino de situarlo en el mismo espacio de importancia que se le da en las biografías de los hombres. Y eso no es todo. En la descripción de muchas mujeres, cuya aportación al progreso o a la creación es muy importante, estas biografías las sitúan como amateurs o se habla de ellas como las que sirvieron de inspiración a los hombres que (ellos sí) eran los verdaderos inventores, fotógrafos, pintores, científicos…
Estamos en un momento trascendental donde las aportaciones de cada una de nosotras, por pequeñas que sean, van a marcar la Historia del futuro y el futuro de la Historia. Está en nuestras manos crear una narración con multitud de puntos de vista, en la que todas las voces sean representadas. Y para ello necesitamos aumentar el número de editoras y sentirnos legitimadas para crear más biografías de mujeres y mejorar los artículos existentes con perspectiva de género.
Por todo esto, #MeNiegoA que nuestra Historia siga siendo contada sin nuestra voz, la de la mitad de la población, la de las mujeres.
#MeNiegoA renunciar a vosotras, mis mentoras, mis referentes y mis antepasados.
#MeNiegoA que el argumento sea que “la Historia pone a cada uno en su lugar” porque, queridas mías, “la Historia la escriben los vencedores”. Y esos vencedores han sido siempre hombres, que en muchas ocasiones ni siquiera nos han considerado sus iguales.
#MeNiegoA aceptar la invisibilización de las mujeres que han sido, son y serán parte de la Historia. Sólo entre todas conseguiremos ponerlas en el lugar que se merecen haciendo visible su relevancia y podrán así conformar nuestra propia Historia.